Maroon 5: Overexposed

Entre 2010 y 2011 Maroon 5 dejó su vara bien alta al presentarnos su disco Hands all over, donde pudimos escuchar por todos lados canciones bien pegajosas como Misery y Moves like Jagger, y es porque este quinteto californiano sabe lo que quiere, dan en el clavo, y se arriman con los mejores productores musicales para publicar hits tras hits.
Overexposed (2012) nos muestra el lado más romántico de la banda, destacando temas como Payphone y Daylight, sin dejar de lado ese pop con tintes electrónicos y reggae que los representa. Sin embargo, el álbum continúa con la línea de sus antecesores, harto efecto vocal e instrumental y un buen hit para romperla, pero por el momento no hay nada para sorprenderse y decir que este disco se diferencia al resto por tal motivo. Es un álbum igual que los anteriores, no muestra nada nuevo, ni tampoco en sus letras, de esta manera, la banda prefiere irse por la línea segura, evitar riesgos y mantener a sus fans al tanto de lo que hagan, más de lo que puedan llegar a ofrecer.
Este disco es como una muestra de cariño o cumplimiento con sus fans, porque si bien sus dos primeras producciones (Songs about Jane y It won´t be soon before long), nos sorprendió a todos por ser la primera banda en años en sacar un estilo acertado, bien definido y popero, eso quedó en el pasado porque la banda continúa con la misma fórmula, pero sin atreverse en agregar un ingrediente más sabroso a las canciones que de seguro el publico quedaría más satisfecho y contento con el producto que le están entregando.

En palabras simples el disco no es malo, es entretenido y tiene un buen kick start o punto de partida como se dice popularmente. One more night es una canción 100 por ciento bailable, muy radial que habla de un hombre que no puede dejar a su mujer a pesar de las constantes discusiones porque se siente amarrado a ella en términos sexuales, algo así como ese tipo de relaciones tormentosas donde la mujer llega ser una droga.  Este tema es un buen puente para pasar a la segunda y el sencillo del disco Payphone, una historia de amor, un poco más lenta pero sin olvidar el pegajoso estribillo que te hace mover de un lado a otro y que tiene como invitado al rapero Wiz Khalifa.
Adam Levine y compañía anunciaron su segunda visita a Chile, que está agendada para el 29 de agosto en el Movistar Arena. La vez anterior en 2008 cuando vinieron a promocionar It won´t be soon before long, el concierto no duró más de hora y media y se entiende porque tenían dos discos en su haber. Pero desde entonces han pasado dos álbumes más y lamentablemente el repertorio de la gira actual es bien escaso, donde no superan las 14 canciones. Esperemos que en su pasada por nuestro país sean un poco más generosos, y entreguen a sus fanáticos unos regalos más para la alegría de ellos, en relación al elevado valor de las entradas.